Lesión superada. La rotura de ligamentos que sufrió en su rodilla izquierda, en el partido jugado ante Petrolero de Yacuiba por el torneo Apertura, quedó atrás para el guardameta nacido en San José de Chiquitos. Ahora la mirada está en recuperar la titularidad, esta vez defendiendo los colores del club albiverde. "Primeramente estoy agradecido con Dios, por permitirme trabajar al 100 por ciento con el equipo, con miras a un nuevo desafío en mi carrera", sostuvo el jugador formado en la academia Tahuichi.
Tras darse la posibilidad de jugar ante la academia paceña, Quiñónez dijo estar ansioso por jugar aquel duelo, para el cual dijo estar preparado para afrontarlo. "Tengo lindos recuerdos con Bolívar donde viví momentos gloriosos, pero ahora me toca defender a muerte a Oriente Petrolero", sentenció.
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