CJP. Carlos Arias lamenta que un inesperado error suyo haya sido decisivo para que Oriente quede eliminado de la primera fase de la Copa Libertadores. El portero "refinero" retornó ayer junto a sus compañeros del plantel desde Montevideo, donde el martes por la noche cayeron por 2-0 ante Nacional.
"Ha sido mala suerte. En el segundo gol de ellos la pelota se desvió en un compañero y después fue difícil reaccionar. Esta derrota nos deja un sabor amargo, pero no queda otra. Ahora hay que abocarse al torneo local", dijo Arias.
Al que se lo vio ayer muy apenado por el fracaso deportivo fue al presidente del club albiverde, José Ernesto Álvarez, quien admitió que no estaba preparado para este traspié en la Copa.
"Uno hace números con la expectativa de clasificar a la siguiente fase, sin embargo, ahora confieso que no estaba preparado para esto", sostuvo el mandamás de la entidad refinera.
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