Lo perdía Oriente, no tenía actitud ni precisión, la victoria parcial de Wilstermann era justa y la pudo ampliar en la segunda etapa, pero perdonó. El albiverde ya solo esperaba el final del partido. Lo que nadie imaginó en el Félix Capriles, incluido los hinchas orientistas, fue que el 2-0 a favor del aviador iba a cambiar. Es que la de anoche fue la aparición de Federico Martínez, el héroe que en dos minutos revirtió la historia del partido: 2-2 en descuentos.
Wilster pagó caro no haber ‘matado’ a su rival. Lo tuvo a disposición, pero lo perdonó. Manejó mejor la pelota en el global ingresando por derecha con Félix Quero y por el centro con García Berodia pero no daba el tiro de gracia. La clave de Oriente fue el descuento de Martínez porque él creyó, y en la última jugada de riesgo logró igualar. Este equipo, que parece haberse gastado todo el nervio y el tesón en el primer partido ante Nacional por la Libertadores, rescató ayer un punto que lo alivia.
En el partido, fue un mal primer tiempo de Oriente, la imprecisión al momento de lanzarse al ataque (sobre todo cuando atacó con Marvin Bejarano), le acabó pasando factura. Wilster fue un merecido vencedor en esa etapa porque poco antes (24’ y 28’) Rodrigo Ramallo estuvo a tiro de gol. En la primera Brau se la sacó cuando quedaba solo frente a Arias y en la segunda el arquero detuvo con solvencia.
A esa altura el partido se jugaba a plena lluvia y controlar la pelota para entregarla con precisión se hacía difícil. Los de Tabaré Silva, en ese aspecto, perdieron más. No había conexión contínua entre los volantes Juan Quero, Mojica y Zabala y si eso no pasaba era difícil que la pelota le llegara a Duk. Mojica (30’) intentó mostrar el camino con su remate cruzado, pero Hugo Suárez desvió el balón.
Pero Wilster tenía más hambre y el cabezazo que perdió Ramallo (39’) en el área grande (gran centro de Félix Quero) dio un aviso de lo que se venía. El local insistía y terminó teniendo su premio a los 41’ con un golazo de Quero. Bejarano lo miró, y el de Wilster sacó un riflazo cruzado que acabó introduciéndose en el ángulo derecho de Arias. Golazo para el 1-0 y premio para sus hinchas que no se movían pese al aguacero.
Esa primera etapa se fue con un intento de Duk, cuyo disparo al final acabó en las manos de Suárez. En el complemento y obligado por la desventaja, Silva envió a la cancha a Fernando Saucedo por ‘Nacho’ García duramente golpeado por Alonso y a Federico Martínez por Zabala. La apuesta era otra, intentar darle presencia en el área rival.
Sin embargo, el rojo volvió a golpear. Arias cometió una falta a Ramallo dentro del área y el árbitro cobró penal. García Berodia lo ejecutó y puso el 2-0.
La aparición fulgurante
Fue Martínez el héroe, primero porque de las tres opciones claras que Oriente tuvo en el complemento, él metió dos. La primera tras remate de Bejarano (89’) y la segunda con un cabezazo al ángulo, tras centro de Mojica (91’) que poco antes ya mostraba impotencia.
Medina, Garzón y Zenteno no lo pudieron agarrar porque el uruguayo demostró que si le dan pelotas en el área (donde se siente cómodo, no saliendo lejos a pivotear) puede ser mortal. Berodia poco antes estrelló el balón en el palo tras gran jugada y Ramallo igual perdió ante Arias. Oriente perdía merecidamente, pero la garra charrúa lo salvó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario