lunes, 19 de octubre de 2015
Ciclón obtiene un punto y le amarga a Oriente
Xabier Azkargorta no se resistió a la tentación de ir a reclamarle airadamente al árbitro Hostin Prado tras el empate como local de Oriente Petrolero ante el tarijeño Ciclón (1-1), anoche en el estadio Tahuichi Aguilera. Fue parte de la impotencia porque su equipo no pudo lograr la victoria ante un rival que se paró bien y no fue menos.
La igualdad frenó a Oriente en el quinto lugar de las posiciones, con 16 unidades, y puso fin a su participación en la primera rueda del Apertura, pues el cotejo correspondiente a la jornada 11 ya lo jugó el anterior domingo en cancha de Petrolero, al que venció por la mínima diferencia.
Terminar la ronda de ida a siete puntos —que pueden ser más— del líder (The Strongest tiene 23, con un encuentro menos) no es lo mejor para un conjunto albiverde que armó equipo como para pelear desde el arranque por los primeros lugares, y se ha rezagado en el intento.
Ayer tuvo poca claridad para generar acciones ofensivas y cuando lo logró le faltó una buena definición.
De paso se le complicaron las cosas cuando a los 39 minutos Ciclón abrió la cuenta con un magnífico gol, el mejor del torneo hasta ahora, pues Nelvin Soliz sacó un derechazo luego de recibir un pase y mandó la pelota a un ángulo, la hizo subir y luego bajar abruptamente, lejos del alcance del guardameta.
No fue ninguna casualidad porque aparte de defenderse bien, el cuadro tarijeño también tuvo cosas interesantes en ofensiva. Incluso pudo ganar, pero en una de las últimas jugadas del compromiso, Álvaro Paniagua remató apenas desviado.
Oriente logró la igualdad mediante un tiro penal convertido por Sergio Almirón, a los 2 minutos del segundo tiempo. La acción previa fue dudosa, pues el árbitro interpretó que hubo mano o al menos intención de parte de un zaguero de la visita.
Le quedaba mucho tiempo al conjunto cruceño como para buscar el tanto de la victoria, lo hizo pero de manera infructuosa y no es que tuvo muchas opciones.
Más bien le costó, sobre todo porque Ciclón se paró bastante bien manteniendo una idea de su entrenador, Víctor Hugo Andrada, de cerrar espacios.
Rubén de la Cuesta, que se perdió el tanto en el área chica, y Joel Bejarano, cuyo disparo salió apenas desviado, fueron las dos jugadas más claras de las que dispuso el equipo de Azkargorta.
Desde su llegada hace cuatro encuentros, el español no ha perdido, pero a no dudar que el empate de ayer fue el más amargo de su aún corta estadía.
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