La permanente rotación de arqueros, un puesto muy complicado en todo equipo de fútbol, no genera ninguna seguridad para ellos, incluso para el mismo equipo, ya que por el contrario, genera desconfianza en los partidos cuando les toca actuar.
Eso lo afirmó Luis Esteban Galarza, uno de los porteros más sobresalientes que tuvo el fútbol boliviano en toda su historia.
Ninguno agarra confianza. Para Galarza, cuando se trata de un equipo "grande", se entiende que los arqueros tienen el mismo nivel de jerarquía, pero siempre hay uno que es el titular y el otro tiene que esperar su oportunidad.
Pero cuando el entrenador opta por la llamada rotación de arqueros, alternando a ambos en los partidos, eso genera desconfianza.
"Ninguno de los dos agarra confianza, al contrario eso produce inseguridad porque no te podés estabilizar y por supuesto se traslada al equipo", dijo.
En cambio, otra cosa es que si el arquero considerado titular se lesiona, entonces pasa a ser titular el segundo arquero.
"Si rinde bien, por supuesto que el entrenador lo tiene que mantener y el que estaba de titular, tendrá que esperar su oportunidad, pero no me parece bien que se alterne continuamente, al menos yo no lo veo bien y tampoco como entrenador lo hice", explica.
En Oriente Petrolero. En el actual torneo Clausura de la Liga, en Oriente Petrolero que dirige el entrenador argentino Ángel Guillermo Hoyos, se produce un hecho singular con los arqueros Marcos Argüello y Guillermo Viscarra.
Hoyos alterna constantemente a ambos porteros y al parecer no les comunica quién va ser titular en el partido próximo, hecho que ha motivado mucha incomodidad en Viscarra que al parecer quiere cambiar de aires.
Lo que sí es cierto, es que al final del campeonato habrá novedades en torno a uno de ellos.
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