Marcar un gol es el motivo de euforia y bastante alegría para cualquier jugador, pero marcar el tanto de la victoria en un superclásico cruceño es para revivirlo una y otra vez. Esta experiencia la vivió el capitán de Oriente Petrolero, Ronald Raldes, que selló el 2-3 en el choque número 165 entre su equipo y Blooming. El defensor habló con DIEZ y recordó esta y otras experiencias con nosotros. Acompáñanos en este viaje que nos hace revivir lo hecho por el capitán albiverde.
Era un 23 de febrero de 2014, cuando las hinchadas en el Tahuichi ya se bajaban de las graderías, pues sus equipos Blooming y Oriente igualaban 2-2 y parecía que todo ya estaba dicho. Pero cuando se jugaba un minuto de adición, un cabezazo cambió la historia. Raldes apareció tras un tiro libre de Gualberto Mojica desde el lado izquierdo para sellar la victoria verdolaga que desató la euforia de su hinchada.
Raldes toma esta vivencia como la más importante en su carrera en el balompié nacional. “El clásico que marcó mi carrera fue el que logré marcar el 3-2. Justo fue el primer clásico, después de mi regreso (a Oriente) y mi primer tanto que marqué en los clásicos. La verdad que fue un lindo partido, lo intenso que fue lo parejo y marcar justo en mi regreso al fútbol boliviano fue especial. Esa sensación siempre la voy a recordar”, expresó emocionado Raldes a DIEZ.
Por este y todos sus aciertos que ha tenido como futbolista las muestras de cariño hacia él son interminables; pancartas, mensajes, saludos, felicitaciones le llegan desde su retorno al fútbol de Bolivia. Hace poco llegaron a San Antonio unas fans con un cartel que decía: “Te queremos Raldecito”. “(Risas) Siento mucha gratitud con la gente y las muestras de cariño. La verdad que es lindo que las personas se acerquen no solo a mí, sino a todos los jugadores”, dijo el capitán.
El consejo
Después de haber recorrido 17 años en el fútbol, Raldes es palabra autorizada para dar un mensaje a todos aquellos futbolistas que por primera vez disputan un clásico o juegan en los equipos más grandes de Santa Cruz. “Yo creo que la única palabra es disfrutar el momento, el entorno y cada entrenamiento es lo más lindo que puede vivir un jugador y sobre todo saber que uno lleva el nombre de una institución”, afirma el zaguero.
Hoy se escribirá una nueva página en la historia de los clásicos, ¿quién logrará sellar su nombre en el Tahuichi?
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