Barras rompen tranquilidad en el primer día del 'vasco'

Hacía algo más de 20 minutos que Xabier Azkargorta había puesto punto final a su primer día como entrenador de Oriente Petrolero, e incluso había abandonado la cancha, cuando de pronto la detonación de petardos muy cerca de la sede rompió la tranquilidad que hasta ese momento había imperado.

Era un grupo de barras del equipo albiverde, algo más de 100, que entonando estribillos, amenazantes y soeces, pedían "hablar" con los jugadores.

Momento difícil. Un grupo de la denominada barra albiverde "Los de Siempre" primero habló con el gerente deportivo Ronald García, exigiéndole hablar con el plantel que ya se encontraba en los vestuarios. García les planteó hablar con tres entre ellos el capitán Ronald Raldes pero los hinchas exigieron la participación de todo el equipo.

Minutos después, el plantel en pleno salió y juntó a los barras, que fueron hasta el centro de la cancha donde tuvieron una "conversación" de más de media hora.

El motivo sin duda es el mal resultado que hasta ahora ha conseguido en el torneo Apertura de la Liga, por lo que "exigían un mayor compromiso y que pongan huevos" en todos los partidos.

A ocasiones la charla era interrumpida por aplausos.

En determinado momento llegó una patrulla de la Policía, pero luego de mirar desde la puerta por unos momentos se retiró.

Al final de la "charla" ningún jugador quiso emitir opinión alguna.

Trabajo. Ayer en la mañana fue el primer día de práctica de Xabier Azkargorta como entrenador de Oriente Petrolero.

El vasco, aún sin su cuerpo técnico conformado, dirigió todo, pero antes de ello mantuvo una charla de algo más de diez minutos con el plantel.

Luego hizo una labor muy liviana, después de resistencia física y finalizó con trabajo de recreación que al parecer le sentó muy bien al equipo de acuerdo a lo dicho por ellos mismos. Oriente debe enfrentar en la próxima fecha a Real Potosí.