Xabier Azkargorta se mostró satisfecho por el cometido que tuvo su equipo, Oriente Petrolero, que venía de soportar una fuerte presión porque hasta la séptima fecha no se daban las cosas, y lo que provocó el cambio de timón en la dirección técnica, se fue Roberto Pompey.
El vasco ya había anticipado que el equipo llegaba enchufado al compromiso con el ‘lila’, y ese optimismo se plasmó a la hora de la verdad en un triunfo amplio, y lo que es más importante con buena exposición de juego.
Pasó la octava fecha y ahora se tiene que hablar del clásico -dijo Xabier-, debemos tomar todos los recaudos para este encuentro que como todo clásico tendrá sus complicaciones, anticipó.
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