Wilstermann acabó con el invicto de Oriente Petrolero (2-0) desde que Eduardo Villegas asumió el mando y con dos yerros defensivos de la visita, uno en cada etapa, logró tres puntos que lo ubican a solo dos unidades de Blooming, único líder en la tabla de posiciones del torneo Apertura de la Liga, cumplida la tercera fecha.
El de ayer fue uno de esos partidos que el equipo albiverde estaba acostumbrado a sortear sin problema en ese estadio. Incluso, con menos equipo salió bien parado del Félix Capriles. Sin embargo, ayer sucumbió ante un rival mezquino, que generó poco peligro pero que, a diferencia de Oriente, demostró efectividad. Los partidos se ganan con goles y no con merecimientos.
En la primera etapa los de Villegas tuvieron un par de opciones para marcar, pero faltó frialdad, en un caso, y suerte en el otro, en ambos casos con Mojica como protagonista. En una jugada, a los 37’, Marvin Bejarano habilitó al volante pero este, en vez de dominar el balón, quiso definir con un toque suave que Dituro controló sin problema. En la siguiente acción, la más clara de las dos, el travesaño negó la posibilidad a la visita tras un tiro libre del debutante Mojica.
Oriente tenía dominado el partido hasta que una confusión entre Saucedo y Raldes -que se confiaron el uno al otro- dio origen al gol de Neumann tras una guapeada de Andaveris, que se esforzó hasta llegar a la línea de fondo y habilitar al paraguayo, que tocó suave para el 1-0. Wilstermann se había aproximado en tres ocasiones hacia el arco de Arancibia en esa primera fracción, pero sin causar daño.
La actuación del árbitro José Jordán tuvo mucho que ver en la derrota parcial del equipo refinero porque en dos ocasiones le perdonó la expulsión a Cristhian Vargas, cuando este ya tenía tarjeta amarilla por un agarrón a Dos Santos en el minuto 21. A los 32’ volvió a cometer otra falta al mismo brasileño (también agarrón) y a los 44’ frenó el balón con la mano izquierda ante una arremetida de Oriente.
Segundo tiempo
Tras el descanso Oriente retornó a la cancha con los mismos hombres, cuando se esperaba a alguien más en ataque para acompañar al solitario Estigarribia. Aun así volvió a ser dominador, pero sin hacer daño.
El ingreso de Matías García por Meleán le dio más claridad en ofensiva, y más tarde el cambio de Rodrigo Vargas por Saucedo empezó a generar preocupación.
Cuando más cerca estaba Oriente de empatar, arrinconando a su rival, otra desinteligencia defensiva, esta vez entre Cuesta y Bejarano, culminó con el gol de Andaveris (90’), que con más garra que otra cosa fue la figura. Dos minutos antes el brasileño Dos Santos estrelló el balón en el travesaño, lo que pudo ser el empate y así el final se hubiera planteado de otra manera.
Wilstermann ganó tres puntos porque aprovechó dos errores defensivos y porque cuando Oriente tuvo su chance no pudo ni supo transformar esas opciones en gol. Justo y merecido premio para un equipo que con poco marcó diferencia y castigo para otro que teniendo con qué no consiguió plasmar esa superioridad.
La derrota se da a menos de una semana de un clásico caliente, ante un rival que llega mejor de ánimo y con ganas de poner fin a más de tres años de sequía. Puede ser el momento
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