Nadie duda que la esencia absoluta del fútbol es el gol, aún sea en el partido más insignificante pero adquiere mayor trascendencia cuando se lo hace en los partidos denominados "clásicos" de una ciudad o de un país.
Pero no cualquiera tiene esa virtud porque los elegidos son pocos y ellos quedan grabados para siempre en la historia tal como ocurre con los goleadores del mayor clásico del fútbol cruceño, el argentino Raúl Horacio Baldessari y los bolivianos Víctor Hugo Antelo y Gualberto Mojica.
Raúl Horacio Baldessari. Un auténtico "fenómeno" del gol. Llegó a Blooming en los primeros días de 1978 y anotó su primer gol a Guabirá el 15 de enero.
Por su gran olfato para el gol pasó a ser una verdadera pesadilla en los clásicos. Primero con la camiseta celeste con la que anotó 12 goles, pero en diferentes épocas y 5 con la de Oriente, para totalizar 17, cifra que a pesar de los años se mantiene.
Víctor Hugo Antelo. Uno de los más descomunales goleadores que tuvo el fútbol boliviano.
Apareció en Oriente en 1983 y cuando despegó fue difícil pararlo. Con la albiverde alcanzó a anotar 10 goles y luego en dos etapas 6 con la de Blooming, es decir paró la cifra en 16.
Gualberto Mojica. Doblemente valorable es el jugador de Oriente Petrolero, que siendo volante se ubica con 15 goles en ambos bandos.
Con Blooming anotó 8 goles en tres etapas diferentes y con Oriente ya lleva 7, en total 15. Es decir que como está en actividad, tiene la oportunidad de alcanzar y sobrepasar a Antelo y Baldessari con sus marcas históricas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario