Consolidar una defensa casi nueva será clave en Oriente

Consolidar la última línea es uno de los objetivos del técnico de Oriente, Wilson Gutiérrez, que para este 2017 decidió apostar por un cambio casi total de la última línea, en la que solo queda Óscar Ribera, el resto son caras nuevas: El ecuatoriano Lenín Porozo, el colombiano Johnny Mostacilla y el nacional Caleb Cardozo. Los cuatro están confirmados para enfrentar este domingo a San José, en Oruro, desde las 15:00.

Tras el final del anterior torneo, Oriente se quedó sin los centrales Ronald Raldes y Hugo Souza, además de Gustavo Olguín, por lo que el objetivo del cuerpo técnico y de la dirigencia fue rearmar la última línea, en la que reforzar el lateral izquierdo también era una de las prioridades.

En se sentido, se apostó por dos zagueros centrales extranjeros y también por Luis Méndez, un defensor que es de la casa, aunque no ha tenido continuidad en los últimos años tras sufrir una grave lesión.

En el primer encuentro, Mostacilla y Porozo no tuvieron muchos inconvenientes, lo mismo que Cardozo, por lo que el debut fue positivo para agarra confianza y buscar la solidez que tenían la defensa del anterior torneo.

Ribera es el único que no se mueve por la banda derecha, de la cual se adueñó tras aprovechar su oportunidad, luego de una lesión y del mal momento que pasaba Enrique Áñez, que comenzó como titular en 2016, pero se fue apagando poco a poco.

Este domingo el rival será San José, por lo que la última línea tendrá otro exigente examen en el Jesús Bermúdez, un reducto muy complicado.