jueves, 15 de marzo de 2018

Futuro de Clausen depende del partido frente a Guabirá

Néstor Clausen recordó que los resultados mandan en el fútbol, de tal manera avisó que dejará el banquillo de Oriente en caso de una derrota el domingo ante Guabirá en Montero (15:00).

El equipo albiverde suma cuatro partidos sin ganar tras el empate (4-4) ante Destroyers. De momento figura en zona de clasificación al ubicarse cuarto con nueve puntos en el grupo A.

“El partido con Guabirá es el fusible, porque hay que ser sincero. Si no ganamos las tres unidades, después hay un receso (de la Liga), entonces hay que darle tiempo a otro colega para que trabaje”, afirmó Clausen en una caliente rueda de prensa en San Antonio.

Remarcó que los resultados en el fútbol aparecen cuando los equipos están fuertes y unidos.

En el caso de Oriente, el estratega argentino dijo que los altibajos emocionales no permiten sostener el ritmo de juego en los partidos.

Reconoció que le gustan las cosas difíciles y si tuviese que tomar una decisión a título personal le gustaría permanecer en la banca de Oriente, aunque admitió estar sujeto a los resultados.

De hecho no firmó contrato con el club, ya que cuando le toque irse de la institución sólo cobrará hasta el último día trabajado.

Descartó que la actual campaña sea atribuida a una supuesta camarilla, pues confía en la honradez de quienes practican el fútbol. Clausen tomará contacto con jugadores y dirigentes para discutir en conjunto la mejor decisión.

“Si mi presencia está afectando el club, yo no tengo problema en irme”, subrayó.

DICE QUE FUE POSTIVO ABANDONAR LA CANCHA

Néstor Clausen dijo que tuvo un efecto positivo el haberse marchado al vestuario cuando el partido estaba 1-3 a favor de Destroyers, pues dicha actitud levantó a Oriente en el tema anímico y ello le valió para salvar un punto (4-4). Recalcó que no es la primera vez que reacciona de esta forma.

“Fue positivo (dejar el área técnica) porque el equipo tuvo una reacción”, afirmó el ‘Negro’ Clausen, quien fue cuestionado por la hinchada y un sector de la dirigencia.

Aclaró que la decisión de marcharse al vestuario fue forzada por los insultos que bajaban desde las tribunas, los mismos que subieron de tono con el 1-3 de los canarios.

“Soy sangre caliente y los insulté también (a los hinchas). Cuando recibimos el 1-3 imaginate; para evitar cosas peores fue lo mejor retirarme”, justificó.

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